Los alumnos dibujan y pintan con témperas, pastel tiza, marcadores, tintas, lápices y muchos materiales diferentes. Cada uno trabaja a partir de sus motivaciones y a su propio ritmo.
Los jóvenes también pintan con óleo.
El proceso es tan importante
como el resultado.
Cada uno trabaja a su ritmo
y eso permite disfrutar,
sin apuros.